martes, 9 de abril de 2013

Hoy he visto el mar



Foto de CFuentes

Si no me conoces, quizá no entiendas lo que esa sencilla afirmación significa. Pero yo te lo explico. Durante día y medio he trabajado hombro con hombro con personas que viven muy lejos de mí (unos 1000 km en promedio) y a las que, mayoritariamente, no conozcía. He pensado, compartido mi opinión y defendido con energía mis convicciones. Tanto que me he quedado sin voz (aunque tengo otros muchos encantos). He escuchado y aprendido, y he buscado soluciones de compromiso. He cambiado de opinión. He diseñado junto a otras personas un proyecto comprometido, que nos mantendrá ocupados durante nuestra ruta hacia el EABE14 en Úbeda. También he echado de menos algunas conversaciones, y a algunas personas, como he mantenido otras que ni siquiera esperaba, con personas que han sido una sorpresa para mí. He recordado situaciones, afectos, charlas, y he abrazado y besado a aquellas y aquellos a quienes quiero y respeto profesionalmente, a quienes posiblemente tardaré en volver a ver y tocar (soy de tocar, sí). He vibrado con la emoción colectiva, con el sentimiento de trabajo bien hecho, con la sintonía y con las diferencias, con la complicidad. He crecido y madurado, y a la vez, me he portado como una niña llena de esperanzas y como una adolescente efervescente. He sentido agradecimiento porque en Algeciras, como en cada sede del EABE, personas buenas y competentes han recogido el testigo, con toda la historia de aciertos y errores anteriores, y han reinventado fórmulas para mantener la cohesión y el sentimiento de refuerzo colectivo, así como la capacidad de autocrítica de los individuos y del conjunto. Me he reído cuando he comprobado que la comida era, más bien, una colección de minerales exhibida en un jardín botánico. Y me he enfadado cuando el bar del hotel se ha convertido en calabaza, los camareros en ratones huidizos y las conversaciones en clandestinas reuniones de fugitivos y fumadores tras las puertas rotatorias.

Me he levantado esta mañana pensando en qué podía hacer para terminar este EABE13 que no desmereciera, que estuviera al nivel de las 36 horas anteriores. Y he pensado en ir a ver el mar. Solo el amor es comparable con el mar - transparente unos días, turbio otros; tibio o helador, depende de la estación; cuando te adentras, te das cuenta de la inesperada profundidad y oscuridad de sus aguas; desde el acantilado puedes admirar su grandeza; y si hace un sol radiante o la luna está llena, el mar refleja su brillo como si fuera luz propia. A veces te darías un baño, pero no es posible u oportuno; y otras veces, querrías salir de inmediato del agua porque estás tiritando, y la resaca te arrastra hacia dentro. La vida misma, el mar, cuando parece una foto de lo quieto que está, y te transmite toda su serenidad y sabiduría, y cuando te asusta con esas olas ruidosas y amenazantes, mostrándote toda su fuerza y su poder de ser libre por más que tú te empeñes en amansarlo. La vida misma, y el EABE, que es un rebosadero de amor por lo que hacemos y por quienes nos acompañan en este camino enredado.

San Pedro de Alcántara. Foto propia, CC By.

Hoy he visto el mar. Y el continente africano, justo enfrente. Había neblina, sí, pero eso no me ha impedido vislumbrar la silueta de algo grande e ignoto, una realidad que emociona solo con saber que lo que asoma es la punta de un iceberg de arena caliente que bulle de vida. La vida, de nuevo, y el EABE.

PD. La crónica la dejo para otro momento, pero si quieres saber más sobre el EABE aquí puedes empezar a tirar del hilo.

23 comentarios:

  1. Ay Nicolasa, estoy de acuerdo contigo en que he echado de menos algunas conversaciones, entre ellas la tuya. A ver si pudiéramos quedar una noche para hacer un hangout y me puedas contar tu proyecto. besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y cómo te busco en Google+? porque si pongo Nicolasa Quidman....ya sabes quién me sale...:D

      Eliminar
  2. No te digo nada porque tú ya sabes lo que he pensado y sentido.

    ResponderEliminar
  3. He leído post sobre el EABE. Me he impuesto la tarea de leerlos todos y comentar en todos los que crea que puedo aportar algo. Y el tuyo... El tuyo... A ver... Andamos hiperbólicos por la red (y no está mal): "genial", "crack", "fantástico".

    Así que no sé cómo decir, sin palabras gastadas, lo muchísimo que me ha gustado leerte. Muchísimo también es hiperbólico, vale. Pero como es cierto se acepta como animal de compañía. Y cómo comparto bastantes de esas vivencias. Pero peor escritas. :)

    Beso, María. :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo voy a ser escueta: GRACIAS (eso sí, con mayúsculas).

      Menos mal, por otra parte, que la tarea está repartida: yo cuento mucho peor lo que sé, lo que pienso, que lo que siento. Pero ya estás tú, entre otros, para contar eso :D

      Beso, Jose.

      Eliminar
  4. ¡Qué bonito escribes, María! No digo más porque no puedo. Tal cual. Emocionada perdida ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, que viniendo de ti el piropo, no es cualquier cosa ;D

      (Por cierto, muy guapa, y sólida, en la tele)

      Beso

      Eliminar
  5. Sentimiento, emoción, EDUCACIÓN. Y poco más. Gracias, María.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es difícil separarlo, aunque como le decía a José Luis, la razón, en este conjunto, juega también un papel importante. Pero esta vez ha ido de "tripas" ;) Gracias a ti.

      Abrazo.

      Eliminar
  6. Síííí... Porque más es menos. Bien dicho Manuel Jesús. :)

    ResponderEliminar
  7. Yo no pude ver el mar y mira que lo siento. Valiosas palabras además de preciosas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Con lo que nos gusta a los de tierra adentro, ¿verdad? ¡Qué pena que no pudieras! El año que viene tal vez sea más fácil...

      Un abrazo, Yolanda, y gracias por tus palabras.

      María

      Eliminar
  8. ¡Qué bien escribes, y cómo me gusta lo que escribes, María!,...¡toda tu rebosas afectividad, pasión, emoción, cariño... y autenticidad... también en tus abrazos! ;-) https://www.dropbox.com/s/yspx5xt6nrigaeh/P1100144.JPG

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, gracias, me alegra que te guste! Esa foto mola! Creo que en este #EABE13 he dado una cantidad de abrazos incontable jajajaja

      Besos,

      María

      Eliminar
  9. Un placer leer tu crónica María. Y encantos tienes para rato.... no te preocupes por lo de la voz...:)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajajaja, eso espero!!! Un placer ha sido conocerte, Carmen.

      Abrazo y hasta pronto.

      Eliminar
  10. Pues aunque yo sólo lo vi de lejos, tu relato me repone las pilas hasta la próxima vez que tenga la oportunidad de verlo y tocarlo. ¡Qué poquito tiempo te deja el EABE para charlar y tocar a la gente que quieres!
    Tengo pendiente mi post para el EABE, pero en esa lista hay algunas cosas de obligado cumplimiento que se ponen delante, me guste o no me guste.
    Un beso, amiga.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me mola tener "efecto batería". Una alegría verte y hacer risas contigo y con tu equipaje de mano XDDD Me ha encantado conocer a #tuhombre ;D

      Besos, y nos vemos pronto, espero.

      Eliminar
  11. Yo también he echado de menos algunas conversaciones. No pudimos hablar mucho en este EABE. Es difícil poder estar con todos y en todo pero con esta entrada y el camino que nos queda seguiremos encontrándonos y compartiendo espacios. Me he sentido como tú (excepto en lo del mar porque yo sí tengo la fortuna de vivir junto a él). Enhorabuena por tu entrada tan bonita y por las fotos.
    @RomeroCalero

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias! La verdad es que esa sensación de no dar emocionalmente abasto es común a estos encuentros en los que se concentra tanta gente con la que compartes tanto... Pero como sabemos que esto es un viaje de larga distancia, pues otra vez tendremos ocasión ;D

      Abrazos.

      Eliminar
  12. Ay chiquilla! ¿Qué voy a decir que ya no sepas? De tripas, si señor, de tripas y a conciencia. Te leo y me renuevas. Qué importante es que haya quien nos recuerde cómo es el mar, ese mar que vemos cada día.
    Te quiero!

    ResponderEliminar